Sobre el fallo del 20 de mayo del 2022 y los Martinelli
Habiendo sido expuesta públicamente la corrupción del ex presidente Ricardo Martinelli Berrocal, al ser identificado por sus propios hijos como el "familiar cercano" receptor de las coimas de Odebrecht, ¿cuáles han sido las reacciones en Panamá esta pasada semana?
1. El ¨Panamá América¨ destaca como ¨un resultado favorable¨ el que Ricardo Martinelli Jr. y Luis Enrique Martinelli recibieran sentencias de 3 años, en lugar de 9 años de prisión. O sea, perdieron el juego 5 a 0 pero en vez de 9 goles les metieron “solamente” 5, (tres adentro, menos descuento y dos a ser pagados condicionalmente cuando salgan).
Resulta absurdo considerar tal resultado como "favorable". No los absolvieron, los condenaron y eso no es bueno.
El periódico no mencionó en absoluto la responsabilidad de Martinelli padre como beneficiario e instigador del delito, hecho públicamente confesado por los hijos e investigado por los fiscales: fue el ex presidente Ricardo Martinelli quien recibió los sobornos y fue él quien ordenó a sus hijos que los recibieran, “lavaran” y ocultaran.
El antiguo slogan de el “Panamá América”, era: “Divulgamos la verdad que los demás ocultan” . ¿Ahora será "Ocultamos la verdad que los demás publican"?.
El periódico "La Prensa" ha sido el único en brindar una cobertura amplia y constante del fallo, ofreciendo a la vez contexto de manera objetiva.
2. La oficina de Ricardo Martinelli Berrocal difundió un comunicado afirmando que la preocupación del padre siempre fue lograr que los abogados defensores hicieran el mejor trabajo posible "dentro de las circunstancias" y que por eso estaba satisfecho por su labor, lo que me parece un cínico y desvergonzado intento por darle un giro positivo a lo que a todas luces es un desastre: dos hijos presos por servir como intermediarios de la corrupción del padre. Luego de la sentencia condenatoria, representantes de la familia Martinelli han procurado esta semana hacer ver que la rebaja de años de cárcel otorgada indica que Ricardo Jr. y Luis Enrique no resultaron ser tan culpables como en efecto lo son, parte de una estrategia mediática que busca minimizar el impacto del fallo entre la opinión pública y cuyo complemento ya ha comenzado a circular en las redes sociales y secciones de comentarios en periódicos locales.
Esta versión pinta a Ricardo Martinelli como una simple víctima de la corrupción, un honesto y abnegado padre que se sacrificó aceptando una culpa que no es suya, al ordenar a los abogados defensores de sus hijos que lo nombraran a él como el responsable, para así lograr que sus queridos vástagos no pasarán más tiempo en la cárcel.
Esta táctica me recuerda a la del abogado que defendía a un tipo que mató a su mamá y a su papá y que le pidió al jurado que, por favor, "tuviera compasión de este pobre huérfano".
3. La clase adinerada de Panamá dudo que se pronuncie públicamente sobre los efectos del juicio de los hijos de Martinelli. Aunque la mayoría de ellos votó por Ricardito Padre en el 2009, sus andanzas hicieron arder a muchos barcos y su actual situación le recuerda a la élite cómo el efecto de "La Lista Clinton" desbarató económicamente al imperio de Abdul Waked, con muchísima menos evidencia pública de corrupción que la expuesta hace unos días en un juzgado en New York. Silencio y distancia es el mantra de los que saben que a partir de hoy, el que mantenga o inicie conexión, contacto o relaciones comerciales con el ex presidente Martinelli y/o sus intereses y testaferros, corre el riesgo de ser considerado como un sospechoso y posible encubridor, participante o cómplice de actividades ilícitas y verse incluido en las investigaciones y los procesos que, asumo, aún están siendo desarrollados en Estados Unidos contra el expresidente.
El ¨Rico Act¨ de 1970 (Racketeer Influenced and Corrupt Organizations Act) podría ya haber sido invocado y sus consecuencias afectarían a todo aquel que de una forma u otra ha estado en contacto, escuchado, participado, ocultado actividad ilícita y/o que ha sido beneficiado de alguna manera por actividades criminales, (con eso fue que rebajaron a casi cero el control ejercido por la mafia en New York). Es probable que ya exista un "Sealed Indictment" contra Ricardo Martinelli Berrocal, sus cómplices, ex ministros y toda su estructura financiera, en espera del momento adecuado para ser públicamente anunciado por las autoridades norteamericanas.
4. Veremos si las evidencias presentadas en New York para condenar a los hermanos Martinelli y su admisión de haber sido ordenados por su padre a aceptar los sobornos de Odebrecht, poseerán igual peso probatorio en Panamá y ayudarán al Ministerio Público en sus casos pendientes contra el ex presidente. ("Blue Apple", ¨New Business").
El material aportado en juicio pareció indicar o sugerir que parte del dinero mal habido fue utilizado para comprar EPASA S.A., conglomerado mediático que incluye a "El Panamá América" y a otros medios informativos nacionales, (caso "New Business").
Para el Ministerio Público en Panamá ya no hay excusas posibles. Corrupción es corrupción, bajo cualquier jurisdicción, idioma, o geografía. Y la peste emanada del proceso de New York es la misma que se respirará, bajo iguales circunstancias en Panamá, cuando sea ventilado. A los fiscales: doblen las mascarillas y pónganse a trabajar.
5. "La lista Clinton", donde asumo está en proceso de ser incluido Ricardo Martinelli, probablemente incorporará a todos sus negocios, desde los "supermercados 99", hasta las conexiones comerciales y mercantiles del ex presidente, dentro y fuera de Panamá, y quizás se extenderá a todos sus familiares, asociados políticos, sociedades, inversionistas y cualquier tipo de entidad, o persona con la que ha mantenido, o mantiene vínculos directos o indirectos y/o que actúa en representación de sus intereses.
6. No se ha registrado públicamente una reacción de los 165.000 adherentes de su partido, "Realizando Metas". ¿Abandonarán esa agrupación política, por el descubrimiento de que su líder aceptó dinero ilícito a través de sus hijos, para conceder ventajas a la empresa Odebrecht y permitirle ganar licitaciones, cuyos costos exagerados y adendas tramposas, restaron al Tesoro Nacional la capacidad de liquidez con que ayudar a financiar proyectos en beneficio del país y de nuestro pueblo?
7. Ya dije antes que no creo que Martinelli gane en el 2024. El fallo del 20 de mayo pasado, sumado a lo que aún desconocemos que falta por aparecer en su contra, considero que impedirán su regreso al Poder Ejecutivo. No es factible ganar una elección presidencial en Panamá teniendo a los norteamericanos en contra. Por eso, aunque corra, Martinelli pierde.
8. ¿Quiénes se benefician políticamente del fallo del 20 de mayo? El CD y el PRD. Es probable que pronto empiecen a girar los apoyos de la clase pudiente en Panamá hacia Rómulo Roux y el CD, posiblemente con el beneplácito y ayuda de los Estados Unidos.
Roux continúa siendo un enigma nacional que aún no genera duda, o rechazo popular y que resulta aceptable para los intereses que en Panamá favorecen la continuidad del "status quo". El clientelismo político, que sostiene al actual fallido paradigma administrativo, no sería reemplazado bajo su presidencia y eso hace a Roux un candidato "viable".
A pesar de ser el PRD el partido político en Panamá con mayor cantidad de clientes, quien sea que resulte su candidato o candidata en el 2024 tendrá en su contra el presente disgusto con la administración Cortizo, el histórico rechazo nacional a la continuidad partidista en el poder y el repudio por el pasado y presente de ese partido, desafección que se extiende a muchas de las figuras que hoy lo representan política y socialmente.
En cuanto a los independientes, continúa la desunión de sus fuerzas, la ausencia de argumentos coherentes y propuestas concretas para desmantelar al estado clientelista existente, reformar el sistema judicial, etc.
Sus voceros aún no encantan ni convencen a la mayoría del país, y con menos de dos años para la próxima elección, ciertamente el tiempo no representa un factor a su favor.
A menos que despierten y ofrezcan posibles soluciones y argumentos sólidos para resolver problemas nacionales, presenten un frente unido, obtengan el apoyo de respetadas y conocidas figuras del país y aseguren la participación de profesionales capacitados para formar parte de su equipo de gobierno, les puede ocurrir lo mismo que pasó en Venezuela con la oposición al régimen de Maduro: nada.
Por la indecisión entre los independientes y con Martinelli fuera del camino, en este momento la contienda hacia el 2024 se perfila así: ¨un CD aliado al panameñismo y al Molirena, con Roux a la cabeza de la nómina, enfrentando a un PRD probablemente aliado con el ¨Realizando Metas¨, con Martinelli participando, no como candidato, sino aportando lo que le reste de influencia popular, dinero para sufragar la campaña y la oferta de información que pueda afectar a sus rivales. El acorralado ex presidente necesita urgentemente asegurarse algún tipo de blindaje en Panamá, algo que de ganar el PRD le sería accesible a través de las conexiones internas que Martinelli tiene en ese partido y que ha cultivado por años. Si bajo las actuales circunstancias Rómulo Roux obtiene la nominación por el CD, tiene una gran posibilidad de triunfo en el 2024, aunque a mi entender no representa el cambio que urgentemente necesita nuestra Patria.
Todo dependerá del nivel de voluntad, organización y claridad de oferta del sector independiente.
Finalmente, resulta curioso ver como en un Panamá donde la gente comenta, denuncia. descalifica e inculpa sin pruebas, ahora que existen evidencias y razones amplias para acusar, protestar e identificar a un ex presidente como corrupto, coimero y beneficiario del soborno de Odebrecht, pocos mencionan los hechos expuestos el 20 de mayo. Pocos reclaman a Ricardo Martinelli el no haber aclarado públicamente que pasó con los hijos, ni le preguntan si se sorprendió de que fueran corruptos, de que pudieran exigir sobornos y esconderlos sin que él lo supiera, a pesar de ser el jefe del gobierno por entonces. ¿Acaso no le interesa saber cómo obtuvieron ayuda de ministros de su gabinete para cometer los ilícitos?, o explicar al país, en su calidad de ex presidente, si se siente traicionado, o decepcionado luego de ser públicamente identificado, nada menos que por sus hijos, como el corrupto beneficiario de los sobornos de Odebrecht?.
Para la mayoría de los ¨medios de información¨ nacionales el asunto ya es un ¨periódico de ayer¨. La sentencia se ha convertido en un tema que resulta mejor olvidar que investigar, tan incómodo como tratar de averiguar cuántos muertos realmente provocó la invasión del '89, o tratar de explicar a un extranjero como es posible que entre el electorado en Panamá, a pesar de lo ocurrido, Ricardo Martinelli continúe en las encuestas al frente de la intención de voto al 2024, apoyado por paisanos que entierran sus cabezas en la arena, y esperan un milagroso regreso a los “buenos tiempos”.
Ojo: la imagen proyectada por un país que aparenta estar podrido hasta la médula no va a ser reparada internacionalmente por campañas turísticas, ni sirve para atraer inversiones que no sean ilegales. Gente honrada no va a querer invertir en un país bajo una administración pública corrupta, a menos que sea un maleante y su dinero, mal habido.
Como cantó Carmelo en ¨Maestra Vida¨: ¨Déjenme reír, para no llorar¨.
Rubén Blades
27 de mayo, 2022
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