Apuntes desde la Esquina, 7 de diciembre, 2025

Sobre Venezuela y las amenazas de invasión

Son muchos los paralelos que existen entre lo que ocurre en Venezuela y la situación que precedió a la invasión norteamericana de Panamá de 1989. En ambos casos encontramos regímenes autoritarios, irrespetuosos de la ley, hurtando elecciones, con supuestos líderes esgrimiendo machetes o espadas mientras proclaman defender el honor nacional que sus corrupciones mancillan. Una oposición fragmentada por sus egos y ambiciones de protagonismo presidencial, cuyo principal aliciente es el de recuperar el poder perdido. Un pueblo confundido y dividido sobre cuál sería el mejor camino a seguir, cabreado de la política y de los políticos.

Los venezolanos que se oponen a la dictadura institucional de Nicolás Maduro y a la vez no quieren ver a su país invadido por fuerzas extranjeras enfrentan una situación difícil.

Una parte de la "oposición" los insulta, los tilda de comunistas y adoradores de Maduro, aunque sean personas cuyas pasadas y presentes acciones claramente los identifiquen como defensores de la democracia.

En Panamá ocurrió que muchos no encontraron un problema legal ni impedimento moral en aceptar que un ejército extranjero penetrase a la fuerza en su país, ejerciendo violencia contra sus ciudadanos fuesen o no partidarios del régimen. Para algunos, protestar por la invasión equivalía a "defender" a la dictadura militar y al general Noriega. Opino distinto porque me parece absurdo aceptar la premisa de que un país poderoso tiene el derecho a imponer unilateralmente su poderío militar sobre otro más débil.

La situación continúa creando todo tipo de alucinadas conjeturas y comentarios, que son constantemente alimentados por los desvaríos del presidente Trump, que ordena destruir barcos y ajusticiar sin un proceso legal a sus tripulantes por ser alegados narcotraficantes, y simultáneamente indulta a uno de los dirigentes de un cartel de drogas centroamericano, acusado, juzgado y convicto por la ley de los propios Estados Unidos. Esta nueva contradicción sugiere el propósito de influir en la reciente elección presidencial en Honduras a favor del candidato de la derecha, grupo al cual también pertenece el narco liberado.

¿Y cuál es el súbito interés de Trump por Venezuela? No creo que sean los venezolanos, luego de cancelarles cientos de miles de permisos de residencia en Estados Unidos, concedidos por el gobierno de Joe Biden. ¿Será acaso por las vastas reservas de petróleo de Venezuela y los también enormes yacimientos de petróleo de Guyana, país limítrofe con quien mantiene una disputa por el territorio del Esequibo?

Aunque muchos medios especulan que existen motivos suficientes para justificar una invasión militar contra Venezuela, no creo que ocurra tal cosa. El presidente Trump, como lo comprueba su evasión del servicio militar de su país durante la guerra de Vietnam, es reacio a participar en conflictos bélicos.

Enviar norteamericanos a combatir y arriesgar sus vidas en Venezuela no lo ayudaría internacionalmente a obtener ese premio Nobel que tan inútilmente persigue. Además, su actual pésimo nivel de aprobación popular, un 36%, tampoco se vería beneficiado por una aventura que afectaría las aspiraciones electorales republicanas del 2026, hoy aparentemente en peligro.

Muchas son las preguntas pendientes de respuesta.

¿Será posible que Trump ordene la utilización de "drones de guerra" para atacar áreas específicas, como puertos o aeródromos militares venezolanos, con el propósito de enviar un mensaje a las fuerzas armadas y presionarlas a que retiren su apoyo al régimen? ¿Cuál sería la reacción del mundo si Trump autoriza tales acciones de guerra? ¿Qué están pensando y aconsejando los asesores cubanos del gobierno venezolano? ¿A qué país iría Maduro y su selecto grupo?

¿Aceptarían Leopoldo López, Henrique Capriles y Juan Guaidó subordinarse al alegadamente electo presidente Edmundo González y a Corina Machado cuando la democracia regrese a Venezuela, o exigirían nuevas elecciones? ¿Qué pasaría si, luego de la caída de Maduro, nuevas figuras y candidatos venezolanos se enfrentan electoralmente a González, Leopoldo, Guaidó, Capriles y Machado, y los derrotan legal y democráticamente en nuevos comicios? ¿Aceptarían ellos ese resultado?

Panamá

El crecimiento económico de Panamá continúa sin reflejar palpables mejorías en la calidad de vida del ciudadano promedio, sea en el interior de la República o en sus centros urbanos. El impacto de la economía se limita a medir lo que ha funcionado siempre, ignorando la realidad del pueblo y sus insatisfechas necesidades básicas. La ausencia de propósitos económicos que favorezcan y patrocinen la aparición de emprendedores y nuevos capitalistas es parte de la posible explicación a la contradicción del "crecimiento económico nacional" y la parálisis simultánea del "chen chen" personal. El clientelismo político solo crea dependencia, bajos salarios y corrupción.

¿Cómo será entonces posible recuperar la confianza que permita la inversión en un Estado mal administrado por la ineficiente partidocracia tradicional?

África

Es inconcebible el prolongado silencio mediático sobre los asesinatos cometidos contra personas que profesan la fe cristiana en distintos lugares del continente africano. No ocurre solamente en Nigeria, país donde se produce quizás la más cruenta represión. Estos ataques, dirigidos por extremistas islámicos, recuerdan el programa de exterminio nazi contra los judíos durante la Segunda Guerra Mundial.

La extensión del genocidio contra los cristianos en África demuestra, o al menos sugiere, un esfuerzo concertado y dirigido por un propósito: obtener la hegemonía religiosa, no solo en los territorios del subsahara hasta Nigeria, sino en toda la geografía africana.

De Burkina Faso a Mozambique, los atentados contra cristianos ocurren con regularidad e impunidad. Las Naciones Unidas, en representación de los países del mundo, debe intervenir públicamente de manera más efectiva y enérgica, incluyendo la posibilidad de sanciones económicas, rompimiento de relaciones diplomáticas, aislamientos económicos condicionados e incluso el envío de la fuerza internacional denominada "cascos azules" a los países que no cumplan en su deber de proteger la libertad de culto o fracasen en proteger a sus poblaciones de ser masacradas simplemente porque profesan la fe cristiana.

No accedamos a permitir que regrese a la actualidad el salvajismo de las persecuciones que caracterizaron la era del Nerón romano contra el cristianismo.

Rubén Blades
23 de noviembre, 2025.

Todos los escritos de Rubén Blades en ¨La Esquina de Rubén Blades¨
También pueden ser encontrados a través de esta misma página web, en INDICE y/o en BUSCAR, escribiendo una palabra de interés.